El problema principal de los sistemas de armas autónomos reside en la dificultad de anticipar y restringir sus efectos. Desde el punto de vista humanitario, esas armas conllevan riesgos de daño para las personas afectadas por un conflicto armado, tanto civiles como combatientes fuera de combate, así como el peligro de escalada del conflicto.
deberían prohibirse los sistemas de armas autónomos impredecibles, principalmente, por sus efectos indiscriminados. La mejor manera de hacerlo sería prohibir los sistemas de armas autónomos diseñados o utilizados de manera tal que sus efectos no puedan conocerse, preverse y explicarse adecuadamente.